domingo, 21 de febrero de 2016

Clamidia

Chlamydia trachomatis es una bacteria de pequeño tamaño cuya infección constituye la enfermedad de transmisiónsexual más frecuente en los países industrializados, y probablemente a nivel mundial. Hay distintos serotipos dentro de las Chlamydias trachomatis, que son los responsables de tres grandes grupos de infecciones: el linfogranuloma venéreo, el tracoma endémico y las infecciones genitales y perinatales.
El linfogranuloma venéreo es poco frecuente en España, ya que es típico de áreas tropicales, y se caracteriza por una ulceración indolora a nivel genital y la aparición de ganglios inflamados a nivel regional 2-3 semanas más tarde. Debido a la rápida destrucción de los tejidos que causa, pueden aparecer secuelas como retracciones y edema. El tratamientose basa en doxiciclina oral durante 21 días y aspiración de los ganglios inflamados.
El tracoma es una inflamación de la conjuntiva ocular que constituye un problema en los países en vías de desarrollo, ya que puede llegar a causar ceguera.
En España, las manifestaciones predominantes causadas por las clamidias son secreción uretral y vaginal, dolor al orinar, picor, sangrado vaginal, etcétera. Son manifestaciones similares a la gonorrea, pero más leves. Además, es más frecuente que la infección sea asintomática, sobre todo en mujeres, lo que aumenta el riesgo de enfermedad inflamatoria pélvica, ya que al no detectar la infección, no la tratan, por lo que la bacteria puede ascender causando infección del útero o de las trompas de Falopio.

Diagnóstico de la clamidia

Se basa en la identificación del organismo en las muestras extraídas de la uretra o el cuello uterino. No es suficiente con las secreciones, ya que las muestras deben contener células para visualizar bien la bacteria.

Tratamiento de la clamidia

La clamidia se trata con doxiciclina 100mg vía oral durante siete días.  

Clamidia

Chlamydia trachomatis es una bacteria de pequeño tamaño cuya infección constituye la enfermedad de transmisiónsexual más frecuente en los países industrializados, y probablemente a nivel mundial. Hay distintos serotipos dentro de las Chlamydias trachomatis, que son los responsables de tres grandes grupos de infecciones: el linfogranuloma venéreo, el tracoma endémico y las infecciones genitales y perinatales.
El linfogranuloma venéreo es poco frecuente en España, ya que es típico de áreas tropicales, y se caracteriza por una ulceración indolora a nivel genital y la aparición de ganglios inflamados a nivel regional 2-3 semanas más tarde. Debido a la rápida destrucción de los tejidos que causa, pueden aparecer secuelas como retracciones y edema. El tratamientose basa en doxiciclina oral durante 21 días y aspiración de los ganglios inflamados.
El tracoma es una inflamación de la conjuntiva ocular que constituye un problema en los países en vías de desarrollo, ya que puede llegar a causar ceguera.
En España, las manifestaciones predominantes causadas por las clamidias son secreción uretral y vaginal, dolor al orinar, picor, sangrado vaginal, etcétera. Son manifestaciones similares a la gonorrea, pero más leves. Además, es más frecuente que la infección sea asintomática, sobre todo en mujeres, lo que aumenta el riesgo de enfermedad inflamatoria pélvica, ya que al no detectar la infección, no la tratan, por lo que la bacteria puede ascender causando infección del útero o de las trompas de Falopio.

Diagnóstico de la clamidia

Se basa en la identificación del organismo en las muestras extraídas de la uretra o el cuello uterino. No es suficiente con las secreciones, ya que las muestras deben contener células para visualizar bien la bacteria.

Tratamiento de la clamidia

La clamidia se trata con doxiciclina 100mg vía oral durante siete días.  

Sífilis

La sífilis o lúes es transmitida por una bacteria llamada Treponema pallidum. En esta enfermedad destaca la alternancia de periodos en los que las manifestaciones clínicas son llamativas, con periodos de latencia en los que la enfermedad solo es detectable mediante pruebas sanguíneas.

Fases y síntomas de la sífilis

Sífilis primaria

La lesión característica es el chancro. Se trata de una herida en forma de úlcera, rojiza, de fondo limpio, indurada, redondeada e indolora, que aparece en los genitales externos, pero a veces también puede aparecer en la vagina, en el cuello del útero o en la región anal. Esta lesión se acompaña de adenopatías regionales (ganglios inflamados), que son bilaterales, duras, indoloras y móviles.

Sífilis secundaria

Aparece entre seis semanas y seis meses tras la lesión primaria y es consecuencia de la diseminación de la bacteria. Lo más habitual es que se presente como una erupción cutánea generalizada sin picor y que también afecta a las palmas de las manos y a las plantas de los pies. También puede haber fiebre, malestar general, adenopatías generalizadas, condilomas planos (son excrecencias verrucosas en los genitales), placas de alopecia parcheada, etcétera.

Sífilis latente

En este periodo no aparecen síntomas, pero sí se puede detectar la infección mediante análisis específicos. Puede durar años o toda la vida. Se divide en sífilis latente precoz (primer año tras la infección) y sífilis latente tardía (pasado el primer año tras la infección; generalmente esta etapa ya no es infecciosa).

Sífilis terciaria

Es poco frecuente actualmente debido al tratamiento antibiótico de las otras fases. Este estadio incluye una forma benigna de afectación de piel, huesos y vísceras por la presencia de lesiones granulomatosas (los llamados gomas sifilíticos), y una forma de afectación más grave que se caracteriza por afectación vascular (sobre todo a nivel de la aorta) y afectación neurológica (neurosífilis).

Diagnóstico de la sífilis

Se basa en la identificación de la bacteria a nivel microscópico y en pruebas serológicas para detectar los anticuerpos frente al microorganismo. En función de los resultados obtenidos y la clínica se determina en qué estadio se encuentra la infección.

Tratamiento de la sífilis

El fármaco de elección en todas las fases de la sífilis es la penicilina G. Si el paciente está en las fases de sífilis primaria, secundaria y latente precoz, una dosis intramuscular de penicilina G es suficiente. Si se encuentra en la fase de sífilis tardía, el tratamiento será también penicilina G, pero tres dosis en una semana. En el caso de la neurosífilis será preciso administrar penicilina G intravenosa cada cuatro horas durante 10-14 días.
Es necesario tratar a las parejas que hayan tenido contacto en los tres meses anteriores a la clínica

Gonorrea

La gonorrea es una de las enfermedades de transmisión sexual más frecuente y conocida. Se produce por la infección de una bacteria llamada Neisseria gonorrhoeae.
El periodo de incubación, es decir, el tiempo que pasa desde que se entra en contacto con la bacteria hasta la aparición de los síntomas es de 2-5 días.
(Haz click aquí si quieres saber más acerca de la gonorrea).

Síntomas de la gonorrea

Son distintos en hombres que en mujeres:
  • En mujeres es frecuente que no haya síntomas durante mucho tiempo, pero cuando aparecen hay secreción vaginal amarillenta, dolor al orinar, sangrado intermenstrual, dolor abdominal bajo, etcétera. En el 15% de las pacientes no tratadas, el germen puede ascender a través del cuello del útero y dar lugar a la enfermedad inflamatoria pélvica (infección del útero y trompas, que puede llegar a causar infertilidad).
  • En hombres es más frecuente que sea asintomática y suele dar lugar a la secreción de grandes cantidades de moco por la uretra, pudiendo incluso aparecer dolor al orinar.
Otras localizaciones en que puede asentar la bacteria de la gonorrea son: la región anal (generalmente es asintomática, pero puede causar secreción anal, picor o sangrado), la faringe (tampoco suele dar síntomas, pero cuando aparecen destaca el dolor de garganta), o los ojos en el caso de los niños recién nacidos, que se infectan durante el parto si su madre tiene la bacteria (da lugar a una conjuntivitis que se previene administrando una pomada de eritromicina a todos los recién nacidos).
En el 2% de los casos puede presentarse una enfermedad diseminada con fiebre, dolores articulares, manchas cutáneas, inflamación hepática... En este caso el tratamiento requerirá más dosis que en la enfermedad no diseminada.

Diagnóstico de la gonorrea

Se basa en la demostración de la bacteria en la muestra de secreción, tanto uretral, en el caso del hombre, como del cuello uterino, en el caso de la mujer.

Tratamiento de la gonorrea

Una dosis intramuscular de ceftriaxona 125mg. Además, se suele añadir doxiciclina 100mg durante siete días, por la posible asociación con clamidias, que son muy frecuentes. También se tiene que analizar y tratar a todas las parejas en las 2-4 semanas previas a la infección.

Papiloma Virus

Actualmente el papiloma virus es una de las enfermedades de transmisión sexual más frecuentes e importantes. Hay muchas variantes del virus del papiloma humano (VPH), entre ellas se encuentran las de “bajo riesgo” (son las cepas 6 y 11, responsables de las verrugas anogenitales) y las de “alto riesgo” (son las cepas 16, 18, 31 y 45, responsables de displasia y cáncer de cuello uterino, ano, pene y vulva). Sin embargo, lo más frecuente es que cualquier tipo de infección por el VPH curse de forma asintomática.
Se pueden distinguir diversas situaciones en las que se puede producir el virus del papiloma humano:
  • Infección latente: se determina por la presencia del ADN del virus, pero no da síntomas ni causa lesiones en el cuello uterino.
  • Infección subclínica: no da síntomas pero sí se visualizan imágenes de alteración de las células del cuello uterino (displasia, carcinoma in situ), que se pueden ver mediante la citología.
  • Infección clínica: en esta podemos distinguir dos procesos:
    • Condilomas: son verrugas localizadas en los genitales, que pueden ser pequeñas, o alcanzar un gran tamaño. Son dolorosas a la palpación, grises o rosáceas, y producen picor. Después de la infección latente, estas lesiones son lo que más frecuentemente aparece en la infección por el VPH.
    • Carcinoma invasivo: normalmente se produce tras muchos años de infección, y suele desarrollarse sobre zonas con displasia previa. Aunque antes se pensaba que era una infección de por vida, se ha visto que se puede dar también una resolución espontánea, probablemente debido a la acción del sistema inmunitario del paciente. Igualmente, es muy frecuente que permanezca en estado de latencia, dando lugar de vez en cuando a recidivas. Si hay infección por una cepa determinada, se puede producir también la infección por otras cepas distintas.

Diagnóstico del VPH

El papiloma virus se diagnostica por la clínica en el caso de los condilomas, y por la citología para ver si hay alteración de las células del cuello uterino.

Tratamiento del VPH

Los condilomas se pueden tratar con crioterapia (con nitrógeno líquido), con crema de imiquimod al 5%, con resina de podofilino al 10-25%, con ácido tricloroacético, con láser y otros métodos.
En el caso de displasia o carcinoma habría que realizar una biopsia, y la decisión del tipo de cirugía a emplear dependería del estadio de la enfermedad.

Prevención del VPH

El virus del papiloma humano se puede prevenir mediante la vacunación, que se administra en tres dosis a las niñas de 14 años. Se recomienda también a mujeres de mayor edad.
Hay dos tipos de vacunas: una de ellas cubre las cepas 6, 11, 16 y 18, y la otra cubre las cepas 16 y 18; ambas han demostrado su eficacia.

lunes, 8 de febrero de 2016

VIH/SIDA


El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es el virus que causa el SIDA. Cuando una persona se infecta con VIH, el virus ataca y debilita al sistema inmunitario. A medida que el sistema inmunitario se debilita, la persona queda en riesgo de contraer infecciones y cánceres que pueden ser mortales. Cuando esto sucede, la enfermedad se llama SIDA. Una vez que una persona tiene el virus, este permanece dentro del cuerpo de por vida.

Causas

El virus se propaga (transmite) de una persona a otra de cualquiera de las siguientes maneras:
  • A través del contacto sexual.
  • A través de la sangre: por transfusiones de sangre (ahora muy infrecuente en los Estados Unidos) o, más a menudo, por compartir agujas
  • De la madre al hijo: una mujer embarazada puede transmitirle el virus a su feto a través de la circulación sanguínea compartida, o una madre lactante puede pasárselo a su bebé por medio de la leche materna.
El virus NO se transmite por:
  • Contacto casual, como un abrazo.
  • Mosquitos.
  • Participación en deportes.
  • Tocar cosas que hayan sido tocadas con anterioridad por una persona infectada con el virus.
El VIH y la donación de sangre u órganos:
  • El VIH no se transmite a una persona que done sangre u órganos. Las personas que donan órganos nunca entran en contacto directo con las personas que los reciben. De la misma manera, alguien que dona sangre nunca tiene contacto con el que la recibe. En todos estos procedimientos se utilizan agujas e instrumentos estériles.
  • Sin embargo, el VIH se puede transmitir a la persona que recibe sangre u órganos de un donante infectado. Para reducir este riesgo, los bancos de sangre y los programas de donación de órganos hacen chequeos (exámenes) minuciosos a los donantes, la sangre y los tejidos.
Las personas con mayor riesgo de contraer el VIH incluyen:
  • Drogadictos que se inyectan drogas y luego comparten agujas.
  • Bebés nacidos de madres con VIH que no recibieron tratamiento contra el virus durante el embarazo.
  • Personas involucradas en relaciones sexuales sin protección, especialmente con individuos que tengan otros comportamientos de alto riesgo, que sean VIH positivos o que tengan SIDA.
  • Personas que recibieron transfusiones de sangre o hemoderivados entre 1977 y 1985, antes de que las pruebas de detección para el virus se volvieran una práctica habitual.
  • Los compañeros sexuales de personas que participan en actividades de alto riesgo (como el uso de drogas inyectables o el sexo anal).
Después de que el VIH infecta el organismo, el virus se puede encontrar en muchos fluidos y tejidos diferentes en el cuerpo.
  • Únicamente se ha demostrado que el semen, la sangre, el flujo vaginal y la leche materna le transmiten la infección a otros. 
  • El virus también se puede encontrar en la saliva, las lágrimas y el líquido cefalorraquídeo.

Síntomas

Los síntomas relacionados con la infección aguda por VIH (cuando una persona se infecta por primera vez) pueden ser similares a la gripe u otras enfermedades virales. Estas incluyen: 
  • Fiebre y dolor muscular
  • Dolor de cabeza
  • Dolor de garganta
  • Sudoración nocturna
  • Úlceras bucales, incluso infección por hongos (candidiasis)
  • Ganglios linfáticos inflamados
  • Diarrea
Muchas personas no tienen síntomas cuando sucede la infección con VIH.
La infección aguda por VIH progresa durante unas semanas hasta meses para convertirse en una infección por VIH asintomática (sin síntomas). Esta etapa puede durar 10 años o más. Durante este período, la persona podría no tener ninguna razón para sospechar que porta el virus, pero puede transmitirlo a otras personas.
De no recibir tratamiento, casi todas las personas infectadas con el VIH contraerán el SIDA. Algunas personas desarrollan SIDA en un período de pocos años después de la infección. Otras permanecen completamente saludables después de 10 o incluso 20 años.
El sistema inmunitario de una persona con SIDA ha sido dañado por el VIH. Estas personas un riesgo muy alto de contraer infecciones que son infrecuentes en personas con un sistema inmunitario saludable. Estas infecciones se denominan oportunistas. Pueden ser causadas por bacterias, virus, hongos o protozoos y pueden afectar cualquier parte del cuerpo. Las personas con SIDA también tienen un riesgo más alto de padecer ciertos tipos de cáncer, especialmente linfomas y un tipo de cáncer de piel llamado sarcoma de Kaposi.
Los síntomas dependen del tipo de infección particular y de la parte del cuerpo que esté infectada. Las infecciones pulmonares son comunes en casos de SIDA y normalmente causan tos, fiebre, y dificultad para respirar. Las infecciones intestinales también son comunes y pueden causar diarrea, dolor abdominal, vómito, o problemas para tragar. La pérdida de peso, fiebre, transpiraciones, erupciones, y ganglios inflamados son comunes en personas con infecciones de VIH y SIDA.

Pruebas y exámenes

Estas son pruebas que se hacen para revisar si usted ha resultado infectado con el virus. En general, las pruebas están compuestas por un proceso de 2 pasos:
  • Pruebas de detección: existen muchos tipos de pruebas. Algunas son pruebas de sangre, mientras que otras son exámenes de líquidos de la boca. Ambos buscan anticuerpos contra el virus del VIH, el antígeno del VIH o ambos. Algunos exámenes de detección pueden ofrecer resultados en 30 minutos o menos.
  • Pruebas de seguimiento: también se denominan pruebas de confirmación. A menudo se lleva a cabo cuando la prueba de detección tiene un resultado positivo. 
Están disponibles pruebas caseras para detectar el VIH. Si planea utilizar una, revise para corroborar que esta ha sido aprobada por la FDA. Siga las instrucciones en el empaque para asegurarse de que los resultados sean tan precisos como sea posible.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (Centers for Disease Control and Prevention, CDC) recomiendan que todas las personas de entre 15 y 65 años de edad se sometan a una prueba de detección de VIH. Las personas con comportamientos peligrosos deben realizarse pruebas regularmente. Las mujeres embarazadas también deben someterse a pruebas de detección.
PRUEBAS LUEGO DE UN DIAGNÓSTICO DE VIH 
Las personas con SIDA generalmente se hacen análisis de sangre periódicos para verificar su conteo de células CD4:
  • Las CD4 son las células sanguíneas que el VIH ataca. También se llaman células T4 o "linfocitos T cooperadores". 
  • Conforme el VIH daña el sistema inmunitario, el conteo de CD4 disminuye. Un conteo normal de CD4 es de 500 a 1,500 células/mm3 de sangre.
  • Las personas normalmente presentan síntomas cuando su conteo de CD4 desciende por debajo de 350. Las complicaciones más graves ocurre cuando el conteo de CD4 desciende a 200. Cuando el conteo está por debajo de 200 se considera que la persona tiene SIDA.
Otros exámenes incluyen: 
  • Nivel de ARN para VIH, o carga viral, para verificar la cantidad de VIH que está en la sangre.
  • Una prueba de resistencia para ver si el virus tiene resistencia a los medicamentos utilizados para tratar el VIH.
  • Conteo sanguíneo completo, química sanguínea y pruebas de orina.
  • Exámenes de otras infecciones de transmisión sexual.
  • Prueba de tuberculosis.
  • Citología vaginal (prueba de Papanicolaou) para detectar el cáncer de cuello uterino.
  • Prueba de Papanicolaou anal para detectar cáncer de ano.

Tratamiento

El VIH/SIDA se trata con medicinas que evitan que el virus se reproduzca. Este tratamiento se denomina terapia antirretroviral (TARV).
En el pasado, las personas infectadas con VIH comenzaban el tratamiento antirretroviral luego de que su conteo de CD4 descendía o de que desarrollaban complicaciones relacionadas con el VIH. Hoy en día, el tratamiento para el VIH se recomienda para todas las personas infectadas, incluso si su conteo de CD4 aún es normal.
Son necesarios exámenes de sangre regulares para asegurarse de que el nivel de virus en la sangre (la carga viral) se mantenga bajo, o suprimido. El objetivo del tratamiento es reducir el virus de VIH en la sangre a un nivel que sea tan bajo que una prueba no pueda detectarlo. Esto se denomina carga viral indetectable.
Si el conteo de CD4 ya ha descendido antes del inicio del tratamiento, normalmente aumentará de forma gradual. Las complicaciones por VIH a menudo desaparecen conforme el sistema inmunitario se recupera. 

Grupos de apoyo

Unirse a un grupo de apoyo donde los miembros comparten experiencias y problemas en común con frecuencia puede ayudar a disminuir el estrés emocional de tener una enfermedad crónica.

Expectativas (pronóstico)

Con tratamiento, la mayoría de las personas que presentan VIH/SIDA puede llevar una vida normal y saludable.
Los tratamientos actuales no curan la infección. Las medicinas solo funcionan siempre que se tomen todos los días. Si se suspende el medicamento, la carga viral aumentará y el conteo de CD4 descenderá. Si las medicinas no se toman regularmente, el virus puede volverse resistente a uno o más de los fármacos y el tratamiento puede dejar de funcionar.
Las personas que están tomando el tratamiento deben consultar a sus proveedores de atención médica regularmente. Esto se hace para asegurarse de que los medicamentos estén funcionando y buscar efectos secundarios. 

Cuándo contactar a un profesional médico

Solicite una cita con su proveedor de atención médica si tiene cualquiera de los factores de riesgo para la infección por VIH. Llame igualmente si presenta síntomas de SIDA. Por ley, los resultados de las pruebas para el VIH deben ser confidenciales (privados). Su proveedor de atención los revisará con usted.

Prevención

Prevenir el VIH/SIDA:
  • Hágase pruebas de detección. Las personas que no saben que están infectadas con VIH y que se ven y se sienten saludables son más propensas a transmitirlo a otras personas.
  •  No utilice drogas ilícitas y no comparta agujas ni jeringas. Muchas comunidades tienen programas de intercambio de jeringas, donde usted puede desechar las jeringas usadas y recibir jeringas nuevas y estériles. El personal de estos programas también pueden remitirlo a un tratamiento de la adicción.
  • Evite el contacto con la sangre de otra persona. En lo posible, use ropa protectora, una máscara y gafas de seguridad cuando atienda a personas lesionadas.
  • Si usted obtiene un resultado positivo en el examen para VIH, puede transmitirle el virus a otros. No debe donar sangre, plasma, órganos ni semen. 
  • Las mujeres VIH positivas que podrían quedar embarazadas deben hablar con su proveedor de atención sobre los riesgos para el feto. También deben analizar métodos para evitar que el bebé resulte infectado, como tomar medicamentos antirretrovirales durante el embarazo.
  • La lactancia materna se debe evitar para prevenir la transmisión del VIH al bebé a través de la leche materna.
Las prácticas sexuales con precaución, como el uso de condones de látex, son efectivas para prevenir la transmisión del VIH. Sin embargo, existe el riesgo de contraer la infección incluso con el uso de condones (por ejemplo, los condones se pueden desgarrar). La abstinencia es el único método seguro de prevenir la transmisión sexual del VIH.
Las personas VIH positivas que estén tomando medicamentos antirretrovirales tienen menores probabilidades de transmitir el virus.
El suministro de sangre en los Estados Unidos está entre los más seguros del mundo. Casi todas las personas infectadas con VIH a través de transfusiones de sangre recibieron esas transfusiones antes de 1985, año en el que comenzaron las pruebas para el VIH para toda la sangre donada.
Si usted cree que ha estado expuesto al VIH, busque atención médica de inmediato. No se demore. Empezar los medicamentos antivirales inmediatamente después de la exposición (hasta 3 días después) puede reducir las probabilidades de que resulte infectado. Esto se denomina profilaxis posexposición (PPE) y se ha utilizado para prevenir la transmisión en trabajadores de la salud lesionados por medio de punciones con agujas.

Nombres alternativos

Infección por VIH; Infección por el VIH; Virus de inmunodeficiencia humana; Síndrome de inmunodeficiencia adquirida